El Extremadura se topa con Álvaro Fernández y vuelve a perder
Estuvo bien el conjunto de Almendralejo, pero los resultados mandan y ponen contra las cuerdas, al menos el debate está servido, a Manuel Mosquera. El fútbol tiene la memoria muy corta y el Extremadura sigue penúltimo con tres puntos –tres empates- tras siete jornadas disputadas.
En la primera mitad fue ligeramente superior el Huesca. Bien armado en labores defensivas y efectivo en la salida de balón. Los que ayer vestían de blanco encontraron muchos espacios entre líneas y con pocos pases superaban una mala y tardía presión azulgrana. La tuvo en los primeros minutos Sergio Gómez que, libre de marca, remataba dentro del área arriba un central lateral. A los 22 minutos, el delantero ejerció de pasador para entenderse con Juan Carlos que se deshizo de su marca para llegar desde atrás y poner el 0-1.
Al Extremadura le faltó claridad en el juego. Había mucha distancia entre líneas por lo que eran continuos los balones largos y plácidos para la defensa aragonesa, mientras que el centro del campo azulgrana sufría de lo lindo. No obstante, tuvo opciones para marcar. Zarfino en un remate a la salida de un córner y Pastrana tras robar el balón en área aragonesa y disparar fuera a portería. En ambas ocasiones, Álvaro estuvo sobresaliente.
El paso por los vestuarios cambió la historia, pero no el final. Los azulgranas se echaron arriba liderados por el empuje y el tesón de Zarfino. Apretaron arriba y la presión en campo contrario daba sus frutos; aunque seguía faltando el remate final. Una puntera que desviara el balón, una cabeza que saltará para rematar el centro; pero nada. Manuel movió el banquillo antes que nunca y dio entraba a Pinchi y Airám Cabrera. Kike Márquez, más atrás y orientado al costado, empezó a tener más contacto con el balón y el Extremadura ganó enteros en la creación de juego. También con la entrada de Ale Díez, que le dio profundidad a la banda derecha en el último tramo de partido.
David Rocha estuvo a punto de empatar con un disparo desde fuera del área que atajó Álvaro Fernández muy ajustado al palo, donde pocos guardametas suelen llegar a tiempo. La tuvo también Escriche para sentenciar, pero fue de nuevo el portero visitante el que se lució para evitar el tanto de Zarfino en los minutos de descuento. Los detalles volvieron a decidir un el encuentro y darle la espalda a un Extremadura que da la cara pero no consiguen buenos resultados. Es lo que tiene el fútbol, que si no marcas goles es imposible que sumes de tres en tres.