El sindicato considera que el alcalde, José Carlos Contreras, “no puede escudarse en la retirada de los derechos básicos a estos funcionarios para solucionar la falta de plantilla que tiene la ciudad y que dificulta tremendamente la realización de los servicios policiales”.
 
En este sentido, CSIF reclama al primer edil “diálogo y negociación, nunca la imposición con la que actúa, para buscar soluciones a las más de 12 vacantes que existen en la plantilla policial. Es inaceptable que de un día para otro se hayan denegado permisos para este mes de julio o que pretenda conceder las vacaciones en días alternos, según le convenga”.
 
CSIF lamenta la actitud del primer edil “cuando conoce, sobradamente, el esfuerzo de estos funcionarios por asegurar el servicio a los ciudadanos de la localidad a pesar de la escasez de efectivos y que, además, se han visto obligados a renunciar a vacaciones, días libres o festivos. La conciliación de la vida laboral con la familiar es un derecho al que no pueden hacer oídos sordos del equipo de Gobierno”.