AMUS liberará este sábado un águila imperial en Hornachos
Su imagen enganchada de una pata en una alambrada fue muy difundida en redes, se quedó grabada y aún permanece en nuestras pupilas. La escena aterradora en la que el ave aparecía colgada volvía a poner a debate las consecuencias de determinados cerramientos de alambres en áreas con presencia de ciertas especies de aves.
Han pasado cinco meses desde que fue rescatada y el equipo de especialistas que la han asistido en el hospital de AMUS ha decidido liberarla a pesar de que solo dispone de una garra, la afectada la perdió.
El hospital de AMUS vuelve a ser noticia, pero en este caso no por un hito conseguido en un paciente recuperado. Hoy, esta organización es objeto de la mirada de la sociedad porque vuelve a desafiar lo injusto, vuelve a redirigir la mala fortuna, en este caso, en un valioso ejemplar de águila imperial, agotando la última posibilidad: liberarla con una sola garra.
Atrás han quedado tediosos meses de curas, incontables lesiones de láser y la gestión de una pata que día a día iba languideciendo víctima inexorablemente de la necrosis. Los diferentes equipos y con asesoramiento y opiniones externas probaron de todo y más para evitar tener que amputar la garra, pero el proceso de hipoxia generado por el seccionamiento de vasos sanguíneos ha sido imparable.
“Lluvia”, es el nombre otorgado a esta hembra de un año de vida de una de las rapaces más amenazadas del planeta. El Águila imperial es una especie endémica de la península ibérica, es decir, solo existe en unos ambientes concretos mediterráneos tapizados de bosques de encinas, alcornoques…, su ligazón a este ecosistema (también en peligro) depende al mismo tiempo de que existan conejos, su principal fuente de alimentación.
Extremadura, es una de las comunidades autónomas con mejores poblaciones de esta águila de “cabeza enfundada de crema y de hombros salpicados de nieve” ya que cuenta con 75/80 parejas de las más de 800 que existen en España y 20 en Portugal.
La historia de esta hembra joven de águila imperial es de muy mala fortuna, ya que quedar atrapada de la manera que quedó, es cómo rizar el rizo de lo complicado, de lo imposible. Lo habitual son impactos o colisiones con vallados o enganches en los nódulos de espinos, si los tuviera, pero trabarse por el tarso entre apenas 1 cm de separación entre dos hileras de alambre es tener el destino muy en contra, es decir tener muy muy mala suerte.
Tras la amputación forzosa de la garra afectada y al no tenerlas todas consigo, es decir cómo sus opciones de adaptación quedaban bastante más reducidas que la de otros ejemplares que son liberados plenos de facultades, le han colocado un dispositivo GPS que permitirá saber en todo momento sus vicisitudes. Con todo, tenemos que señalar que esta acción de tanta responsabilidad (liberar un ave sin una garra) ha sido profundamente consultada, sopesada y contrastada. Existen no pocas experiencias de grandes águilas y aves que viven perfectamente en la Naturaleza con una sola garra.
En la historia del hospital de AMUS todas las águilas imperiales que han ingresado vivas por disparos, electrocuciones, colisiones…han podido ser devueltas a la naturaleza. De todas ellas, solo una, después de un año de vida, moría por una electrocución en una comunidad autónoma vecina. En este sentido, la aportación al mantenimiento de la biodiversidad con ejemplares recuperados de especies tan valiosas otorga al hospital de AMUS una incalculable importancia.
“La pérdida de especímenes de especies amenazadas en el medio natural es muy alta. El porcentaje que llega a los centros de recuperación es ridículo, anecdótico. Por eso, cada individuo recuperado es una batalla más ganada a la erosión genética y supone una inyección de biodiversidad. AMUS, en casi treinta años que cumple, les ha cambiado el destino a miles de animales salvajes que inesperadamente se les trunca su vida por ser víctimas de la actividad de la sociedad. Somos quizá, la segunda y última oportunidad para muchos de ellos, sin lugar a duda algunos la sabrán aprovechar (esperemos que sí) como la protagonista de hoy”, señalan.
La liberación se producirá este sábado a las 12 horas en la localidad de Hornachos.